A lo largo de los años he ido acumulando muchos materiales (telas, botones, pasamanería, pinturas, lanas, fieltro...) eso sumado al espacio que ocupaban las máquinas y la ropa hacía que mi cuarto fuese un completo desastre para cualquier persona que no fuese yo. Así que cuando volví de Oviedo conseguí que una habitación para convertirla en mi
pequeño espacio para coser y hacer todos mis proyectos de manualidades.
Un lugar de tranquilidad solo para mi donde pueda tirar los hilos al suelo (después los recojo) y poner Alunageorge a tope mientras hago mis cosas. Poco a poco he ido llenándolo y ordenándolo todo con mesas, sillas, armarios (para colocar las telas y cajas), el maniquí... Ahora que se acerca la primavera lo que me pide el cuerpo es decorar las paredes, al menos una de ellas, para que así el lugar sea aún más acogedor.
Hace algún tiempo encontré en el blog The crochet underground (echar un vistazo porque merece la pena) un tutorial para hacer una especie de marcos de ganchillo y lo guardé para cuando me pusiese con las paredes del taller. Pues bien, ese momento ha llegado y en la foto podéis ver el resultado. La verdad es que es un proyecto muy sencillo y resultón, yo he decidido colocar en el centro retales de los que me van sobrando y que siempre guardo porque nunca se sabe... Este solo es el primero de los mini-marcos, mi idea inicial es hacer tres y colocarlos a modo de triángulo. Ya enseñaré fotos cuando esté acabado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario